Le Moine et la Nature dans la Tradition Ortodoxe

La familiaridad de los santos monjes con la naturaleza y los animales no sólo es una imagen de la restauración del estado adámico sino también una prefiguración de la era escatológica. Ahora bien, esta restauración sólo podrá ser cumplida “dentro del Cristo”, por la Cruz y la violencia evangélica impuesta en nuestra naturaleza caída y corrompida. Es por medio del regreso a si mismo, el arrepentimiento (metanoia) y la ascesis (enkrateia) que el monje, habiendo tomado conciencia de su responsabilidad en el proceso de muerte que acontece en la creación, podrá reencontrar la comunión con Dios, de forma que toda la creación participará, con él, en la gracia de la deificación. La participación de los monjes en el movimiento ecológico sólo puede ser comprendida dentro del marco tradicional de un testimonio silencioso, ofreciendo a la Iglesia el ejemplo de esta armonía reencontrada gracias al arrepentimiento. (Traducción del resumen extraído del artículo)